Rimaine

rimaine
Rimaine es una hermosa villa de vacaciones con piscina privada, excelentemente mantenida, justo al sur de Bergerac, una zona conocida por sus buenos vinos y su hermosa naturaleza. La casa, muy espaciosa, tiene capacidad para 7 personas y, con su gran jardín, ofrece todo el confort y privacidad tanto dentro como fuera.

Adentro
Amplio salón/comedor con estufa de leña. Cocina con comedor y acceso directo a la terraza. También hay un amplio dormitorio (aire acondicionado) en la planta baja con dos camas dobles de 140x190. Hay puertas que dan acceso directo al jardín. Al lado del dormitorio hay un gran cuarto de baño con ducha a ras de suelo, doble lavabo e inodoro.
En el ^primer piso se encuentran los otros dos dormitorios, cada uno con una cama doble de 160 x 200 y un baño privado con ducha, lavabo e inodoro. Hay un ventilador en cada dormitorio.

Afuera
Precioso jardín (6000 m2) con varias terrazas (cubiertas), zonas para sentarse, zonas de juego (ping-pong, bádminton y voleibol) y, por supuesto, sin olvidar la piscina privada con terraza cubierta y salón. En los meses de julio y agosto se puede utilizar la pista de tenis del pueblo cercano. Los perros son bienvenidos, pero sólo al principio y al final de la temporada.

Ambiente .
El pueblo de Singleyrac con una buena panadería (con una pequeña tienda y un bar) está a sólo 1 km, Eymet (a unos 15 km) es una agradable ciudad turística del siglo XIII, con un agradable mercado provincial todos los jueves por la mañana. Las atracciones turísticas de la zona incluyen: un viaje a Sarlat, una visita a los numerosos castillos y cuevas y un maravilloso viaje en canoa por Dordoña. Bergerac, a unos 15 minutos en coche, también merece una visita. Bergerac es una ciudad preciosa y tiene un aeropuerto al que vuela Transavia, entre otros. ¡La ruta del vino también es recomendable para los amantes del vino! Por supuesto, también se pueden realizar actividades deportivas, como ciclismo, senderismo, remo en el río Dordoña y golf en el castillo de Vigiers (6-9 y 18 hoyos). Por último, hay una escuela de equitación a pocos minutos andando de la casa.